Sinema Da Discurso en el Piso del Senado Sobre el Sostenimiento de las Protecciones Críticas de Atención Médica de los Arizonenses

Oct 29, 2019

Sinema: ‘Es tiempo que pongamos la política partidista fuera del cuidado de salud de los arizonenses’

WASHINGTON – La senadora de alto rango de Arizona, Kyrsten Sinema, hoy dio un discurso en el piso del Senado instando a sus colegas a que paren de jugar juegos políticos con el cuidado de salud de los arizonenses y que empiecen a proteger el acceso a la cobertura de la atención médica para todos los estadounidenses. Durante su discurso, Sinema relató historias de arizonenses con condiciones preexistentes que merecen protecciones críticas de atención médica.

Sinema está enfocada en proteger la cobertura del cuidado de salud y reducir el costo del cuidado para todos los arizonenses. A principios de este año, ella copatrocinó el No Junk Plans Act para prevenir que las compañías de seguros de salud ofrezcan planes a corto plazo que no protegen a las personas con condiciones preexistentes. Sinema también respaldó las resoluciones del Senado haciendo un llamado al Congreso y al gobierno federal a defender a los estadounidenses con condiciones preexistentes en casos actualmente en las cortes donde la cobertura del cuidado de salud está en riesgo.

A continuación está el discurso de Sinema tal como fue presentado. Haga clic AQUÍ para ver el discurso de Sinema. 

Señora presidente, hoy me levanto para señalar uno de los asuntos más importantes que muchas familias en Arizona enfrentan: haciendo el costo de la atención médica asequible y manteniendo las protecciones críticas del cuidado de salud.

A veces los asuntos discutidos en el piso del Senado aparecen muy lejos de las preocupaciones de los estadounidenses cotidianos–pero hoy no.

El debate de hoy centra la atención del Senado en el tema más importante para muchos arizonenses, y ofrece a dirigentes elegidos la oportunidad de rechazar los juegos políticos partidistas a favor de soluciones pragmáticas.

No hace mucho tiempo atrás, las compañías de seguros de salud fueron permitidas en negarles cuidado o sobrecargarles a los estadounidenses basado en el hecho de que estas personas estaban enfermos antes de la cobertura o que nacieron con una condición crónica.

Los arizonenses que antes habían sido tratados para el cáncer de piel o diabetes fueron dichos que ninguna compañía de seguro de salud les ofrecería cobertura, o que los planes de seguro de salud que habían comprado no les cubriría sus condiciones preexistentes, a pesar de las promesas de cobertura comprensiva.

Más allá de las enfermedades mayores, los arizonenses con condiciones comunes como la presión alta, colesterol alto, asma y hasta el acné, fueron negados la cobertura que necesitaban.

Hasta recientemente, las compañías de seguros de salud también han sido permitidas en cobrarle a los consumidores altos precios para los planes médicos, sólo para dejar de lado la cobertura para beneficios de salud esenciales que virtualmente todos los estadounidenses necesitan eventualmente, como los costos de medicamentos, costos de ambulancias, y estadías en hospitales–necesidades críticas que los consumidores correctamente esperan ser cubiertas.

El seguro de salud se supone que esté ahí para cuando las personas lo necesitan.

Los estadounidenses trabajadores que siguen las reglas y pagan sus primas mensuales no se les debe quitar la alfombra por debajo de sus pies en el momento cuando necesitan atención médica.

Por eso es que esta discriminación contra las personas con condiciones de salud preexistentes ahora está prohibida, y la razón porque los planes médicos ahora están obligados a cubrir beneficios de salud esenciales.

Y por eso es que es tan perturbante que la administración y algunos miembros del Congreso han empezado a moverse hacia atrás, permitiendo que las compañías de seguros de salud empiecen de nuevo a vender planes a estadounidenses que no tienen las protecciones de salud que los consumidores necesitan.

El Congreso tiene mucho trabajo por hacer para que el cuidado de salud sea asequible y para proteger el acceso para las familias estadounidenses y las empresas, desde reducir las primas, a parar las facturas médicas sorpresas.

Enfoques partidistas no resolverán estos problemas. Nosotros podemos y debemos trabajar entre ambos partidos para pasar resoluciones bipartidistas–tales y como aumentar el número de médicos para atender los cortes de proveedores, reducir el costo de servicios de salud en el hogar, expandir el cuidado de salud mental y eliminar el impuesto de seguro de salud. Yo he trabajado con colegas en ambos partidos en patrocinar legislación para cumplir estas metas.

Al permitir las compañías de seguros de salud volver a sus viejas prácticas terminarán hiriendo a las familias cotidianas de Arizona.

Estos planes de salud que carecen protecciones son llamados “planes chatarra” por buena razón.

Los planes chatarra confunden a los arizonenses–vendiendo algo facturado como seguro de salud, cuando en realidad se describe mejor como una lista de bienes.

Y cuando se le venden estos planes a los arizonenses, quienes necesitan la cobertura que ellos han pagado, la alfrombra es removida por debajo de sus pies de nuevo.

Yo escucho a diario de arizonenses trabajadores, quienes merecen acceso a las protecciones críticas del cuidado de salud.

Arizonenses como Chantal, quien tiene una enfermedad autoinmune preexistente que, sin tratamiento, la haría quedar ciega;

Arizonenses como Corrine de Phoenix, quien su hija nació con una condición congénita del corazón. Antes que la ley protegiera a las personas con condiciones preexistentes, la familia de Corrine no era permitida conseguir una aseguradora que pudiese proveer cobertura para su familia;

Y arizonenses como John de Casa Grande, que se inscribió a un plan después que le dijeron que sus condiciones preexistentes estaban cubiertas, solo para descubrir, luego de pagar su primera prima mensual, que su condición particular preexistente no califica para cobertura.

Hay 2.8 millones de arizonenses menores de 65 años–al igual que Chantal, Corrine y John–que viven con condiciones preexistentes de salud. Esa es la mitad de todos los residentes de Arizona no mayores cuya atención médica está en riesgo. Estos arizonenses nos recuerdan exactamente qué está en juego y lo que está mal hoy en día con la política partidista en Washington.

Por demasiado tiempo, muchos oficiales electos aquí se han enfocado en cómo pueden obtener puntos políticos para ayudarlos a ganar las próximas elecciones, a la expensa de la salud y seguridad de las familias cotidianas. Los arizonenses están justamente preocupados por la disfunción y el caos que ven venir de Washington que puede amenazar su cobertura de salud.

Esto es inaceptable. Es tiempo de sacar la política fuera del cuidado de salud de los arizonenses.

Hago un llamado a ambos partidos a que abandonen los juegos partidistas, se unan y detegan la venta de planes chatarras que no protegen a las personas con condiciones preexistentes.

Tenemos que proteger el acceso al cuidado de salud para estos millones de arizonenses y decenas de millones de estadounidenses, y debemos hacer que la atención médica sea más asequible para las familias cotidianas.

Insto a mis colegas a votar sí a la Resolución Conjunta 52 del Senado.

Gracias, señora presidente. Cedo el piso y noto la ausencia de quórum.

Haga clic AQUÍ para ver el comunicado en inglés.